Elecciones Andaluzas. Discurso del candidato de Republicanos al Parlamento andaluz, Cesar Alfonso Viñas, Mitin en Jerez de la Frontera, 18 de marzo de 2012

Posted on 2012/03/22

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Cesar Alfonso Viñas es alguien joven y culto, bien preparado, lector de Azaña y de los clásicos del republicanismo, su voz es firme y clara y sabe como llegar a los corazones de quienes le rodean. Su candidatura por Cádiz es un acierto y una promesa, la de que la voz de la República, que es la voz del pueblo, resonará en el Parlamento Andaluz si es elegido como diputado. Quienes estuvimos a su lado el 18 de marzo en Jerez no olvidaremos sus palabras, su ilusión y su entrega. Con republicanos como Cesar Alfonso Viñas nadie se llama a engaño, para él la República no es algo secundario, ni un atrezzo para contentar a las bases, no, la República es un objetivo, un programa, una solución al servicio del pueblo, de los trabajadores, sabe muy bien que quien no tiene el valor o la decisión de defender la República en la calle o en las instituciones, tampoco tendrá el valor de combatir a los mercados. Estas fueron sus razones: 

DISCURSO PARA LA PRESENTACIÓN DE LA CANDIDATURA DE S y R, SOCIALISTAS Y REPUBLICANOS, POR CÁDIZ EN JEREZ DE LA FRONTERA.

Por César Alfonso Viñas

Presentamos hoy domingo 18 de marzo de 2.012 la candidatura por Cádiz de Socialistas y Republicanos, siendo para mí un honor y un orgullo encabezar la lista de S Y R y defender y representar el ideario de esta formación política, que tiene como principal eje de su programa y como primer objetivo la III República sin olvidar la legalidad vigente de la Segunda.

El 14 de abril de 1.931 la filósofa malagueña, republicana y antifascista María Zambrano escribía: “Y se vio a un hombre, a un hombre solo que en la torre del Palacio de Telecomunicaciones de Madrid izó la bandera de la República. Y mágicamente comenzaron a desplegarse en la calle; mágica, instantáneamente aparecieron grupos por todas las bocacalles con banderas republicanas de todos los tamaños; seguían llegando, rodearon bien pronto la Cibeles como una danza ritual. Surgió  incontenible el grito una y mil veces repetido: ¡Viva la República! Y había un hombre con los brazos abiertos y camisa blanca que gritó: ¡Que viva la República! Y hasta ¡Viva España!  que se decía muy poco en aquellos tiempos, porque la patria, esa verdad, no se nombraba. Y gritó por tres veces: ¡Qué viva todo el mundo! ¡Que viva la vida! Así se quedó, inmóvil, con los brazos abiertos. Era un fragmento real de aquel hombre gigante con camisa blanca expresando la Libertad del cuadro Los fusilamientos de Goya de 1.808”. En el siglo XIX ser español era tan doloroso, una herida abierta, que algunos como Larra no podían soportar.

Esta lucha por el republicanismo no es nueva en Europa. El liberalismo, la brutalidad y la aspereza del régimen capitalista, aplastaron las luchas por la emancipación de la República Francesa de 1.793 o la bandera roja de la Comuna de París hace 150 años.

Esta lucha por el republicanismo no es nueva en Andalucía. En la revolución de Loja de 1.861 enarbolaron la bandera de la democracia con aspiraciones de naturaleza republicana. Partía de una monarquía hipostática e iba hacia una República Humana. En la revolución de 1.868 un grupo de hombres y mujeres enseñarían con su conducta a la hija del Deseado, del Borbón sanguinario,  que ellos no eran monárquicos. Gritaban: Españoles, ¡viva la libertad! ¡Viva la Soberanía Nacional!

Por otro lado, Azaña no pudo dejar de evocar a sus oyentes una época española que le era afín: la rebelión comunera de 1.520, la época tan breve como espléndida en que los municipios alcanzaron su mayor poderío para el afianzamiento y desarrollo de las libertades locales,  es también la de mayor robustez en la vida nacional. Hay que hacer del municipio una escuela de ciudadanos. Hay que construir la República desde el municipio.

Tampoco podemos olvidar el trienio bolchevista (1.918-1.920) en el campo andaluz. La prensa burguesa y la prensa obrera esparcieron a los cuatro vientos el relato de un hecho estupendo: en Rusia los bolcheviques se habían hecho dueños del Poder Público, y de la noche a la mañana aplastaban a la burguesía e instauraban un régimen netamente proletario. La noticia produjo el efecto de un explosivo entre los militantes del proletariado andaluz, especialmente entre sindicalistas y anarquistas.

Ostenta el poder en este país la misma oligarquía que lo hiciera durante el franquismo, la misma oligarquía que dio el golpe de Estado fascista de 1.936, con el apoyo de la Alemania nazi, el fascismo italiano de Mussolini y el Vaticano al gobierno constitucional de la II República Española. Gobiernan como traidores de la patria los Infantes de Carrión, esa España inferior que ora, bosteza y embiste que describía el poeta andaluz y republicano Don Antonio Machado. Fue Antonio Machado un alma grande de luz, una conciencia evolucionada de abuelo científico y padre demófilo-  procedente de familia republicana desde la Gloriosa- cuyo hermano era un alma inferior que compuso versos para engrandecer a Franco, el mayor asesino de la Historia de España junto al Deseado.

Gobiernan España el fascismo, la oligarquía empresarial y financiera, la banca privada, la monarquía y la jerarquía de la Iglesia todos al servicio del FMI, el BCE y el Imperialismo en general.

Este poder fascista  se sirve de los representantes elegidos por la ciudadanía para ejecutar de forma precisa, programada  sus planes capitalistas. Es un fascismo en forma de bestia, es un lobo que nunca dormirá con el cordero; es un fascismo que se disfraza con piel de cordero, que se aclara la voz como en los cuentos para atraer a las masas de trabajadores  con discursos fáciles y atrayentes y que terminan calando en la población: ¿cuántas veces hemos oído que son los políticos, los sindicalistas y los emigrantes los culpables de los males que asolan a España?

La Reforma Laboral es un ataque en forma de dos flechas, como explicaría Benito Pérez Galdós el ataque de la flota inglesa en Trafalgar a la escuadra franco-española en los Episodios Nacionales, a la línea de flotación de la organización de los trabajadores, desarbolando su estructura, sus buques insignia, y garantizando que los convenios de empresa prevalezcan sobre los convenios sectoriales. Los parados son tratados como medio, mercancía, cosa; como un tornillo que sobra, una rueda sin máquina donde dar vueltas.

España debe ser una República grande por su espíritu y respetada por sus justas leyes.

Pero España es el país número uno a la cabeza de desapariciones por motivos políticos. Ante los ojos del mundo la Transición guiada por la CIA ya ha dejado de ser modélica tanto en España como en Latinoamérica. La Transición fue una estafa al pueblo español, un pacto de silencio, que condenó al ostracismo a la Constitución de 1.931, que dejó sorda a la tierra para que no oyera los gritos de los españoles, hombres y mujeres, fusilados por el fascismo y enterrados en fosas comunes; la Ley de Amnistía de 1.977, condenada por la ONU, fue una fraude al pueblo español. Ambas tenían como finalidad mantener el franquismo en las estructuras de poder e integrar a España en la OTAN y en la Europa de los Mercados.

Juan Carlos I de Borbón es heredero directo de Franco y está por encima de la Ley, según la Constitución de 1.978, siendo inviolable e irresponsable.

Las Repúblicas del mundo observan como en la monarquía española no existe la independencia de la Justicia, porque las democracias del mundo se quedan atónitas al observar que es el fascismo el que imputa al juez y no el juez el que imputa al fascismo.

Únicamente en la República y no en la Monarquía la Justicia tendrá la independencia que condenará los crímenes del franquismo como de lesa humanidad y devolverá al pueblo español la Constitución de 1.931.

Para esta finalidad necesitamos que se oiga la voz de la República en las Cortes. Necesitamos que la Huelga contra los planes de ajuste sea indefinida por sectores y que tenga por objetivo la creación del Gobierno Provisional, el proceso constituyente para lograr como finalidad la III República.

Han aterrorizado a la población española con el discurso de que República en España es sinónimo de guerra. Y yo me pregunto, ¿no fue la 1º Guerra Mundial, la Guerra Europea, de algún modo una guerra fratricida entre proletarios y campesinos ingleses y franceses contra proletarios y campesinos alemanes usando ambos bandos la maquinaria tecnológica más infernal fabricada por la oligarquía para que la clase trabajadora se destruyera a sí misma mientras que esta misma oligarquía manipulaba los medios de comunicación?

¿No fue la Segunda Guerra Mundial la continuación de la Guerra Española después de que la aviación nazi se cebara con el pueblo español y sus centros culturales y las tropas de élite de Mussollini se hicieran con la capital de la República?

¿Por qué Inglaterra y Estados Unidos, desarmada la Alemania nazi, no liberaron a España del fascismo y restablecieron la República que sobrevivía en México? Una vez más éramos las víctimas, los condenados de Europa, encerrados en la mazmorra mientras la fiesta brillaba allá en lo alto.

Decía Azaña, el trabajo, la necesidad espiritual de trabajar, es el signo de superioridad más evidente de fecundidad de la voluntad. El trabajo nos engrandecerá y engrandeceremos a la República por el reinado de la Justicia.

¿Qué son nuestras costumbres electorales? ¿Qué hace el Parlamento de nuestras costumbres electorales? Un escenario de vanidad y de la nulidad, de la impotencia; un lugar donde se dicen frases pomposas que nadie cree.

No vivimos una crisis económica originada por las hipotecas subprime; vivimos una depresión económica originada por la crisis del petróleo que llaman dulce, el más económico de extraer. Por eso la oligarquía está llevando a cabo tantas guerras económicas. De esta depresión no vamos a salir nunca en el modelo de crecimiento infinito del capitalismo; este modelo sólo lleva al sufrimiento del pueblo, a la esclavitud, al feudalismo y a épocas de hambrunas. Solo un modelo de decrecimiento a través de una Reforma Agraria – creando nuevas relaciones de economía alternativas al capitalismo- podremos salir de este agujero negro.

Andalucía no puede permitir que el Imperialismo use su suelo- aprovechando la situación estratégica- para instalar bases militares que únicamente sirven para las guerras económicas, para el expolio de los pueblos de sus recursos naturales, para reducir a los pueblos a un estado de la Edad Media con el fin de que la oligarquía mantenga sus intereses de clase.

Como dijo Blas Infante, Andalucía representaba el Renacimiento Cultural mientras que Europa representaba el feudalismo más salvaje. Andalucía siempre ha defendido la Paz y la convivencia entre los pueblos desde la Edad de los Metales con Tartessos, pasando por la Edad Antigua con la Bética hasta el Al-Ándalus de los árabes. Blas Infante defendía  que España siempre había tenido una estructura federal; fue la genocida Isabel la Católica, los Austrias y los Borbones los que impusieron mediante la sangre el artificioso Estado unitario.

La República es la defensa de la Paz, la Escuela Pública, de la Sanidad Pública, del trabajo, de la Justicia, del estricto cumplimiento de la Ley. Hay que derogar la Ley de Amnistía, la Constitución de 1.978. Volver a la legalidad republicana de la Constitución de 1.931. Acabar con la impunidad del franquismo y refundar el Estado.

Otra de las luchas a las que se enfrenta la República es la lucha por el laicismo: la separación del Estado de la Iglesia.

La II República estableció el laicismo en la Constitución de 1.931. Una de las grandes batallas que se iba a librar en la España republicana sería la escuela pública. Durante siglos había estado en manos de la Iglesia. La República construyó en tan sólo dos años un total de 13.570 escuelas, mientras que la monarquía construyó en treinta años solo 11.128. Se preveía que la oposición de la Iglesia iba a ser encarnizada. El Vaticano no reconoció a la República en sus inicios como gobierno legítimo.

La República es también sinónimo de Cultura. El proyecto de la Barraca impulsado por el diputado rondeño Fernando de los Ríos y dirigido por el poeta granadino y republicano Federico García Lorca fue criticado con mofas por la revista ultraderechista Gracia y Justicia. Iban vestidos los chicos de la Barraca con un mono. Un uniforme comodísimo para montar y desmontar el tablado, símbolo de la identificación del teatro universitario con el pueblo. Y es que el artículo primero de la Constitución de 1.931- vigente hoy día si se aplicara la Justicia con independencia y rigor- dice: “España es una República democrática de trabajadores de toda clase”.

Para finalizar quiero hacer mías unas palabras de Don Manuel Azaña en 1.911: “Hay una patria que rehacer por la cultura, la justicia y la libertad. No queremos ni podemos perder la esperanza en el porvenir. Pertenezco a una generación que está llegando ahora a la visa pública; que ha visto los males de la patria y ha sentido al verlos tanta vergüenza como indignación. Sería equivocado afirmar que por alumbrarnos con luz eléctrica, viajar en ferrocarril y hablar por teléfono estamos ya en la misma corriente de ideas que ha producido esos inventos; como sería equivocado afirmar que por tener una ley de sufragio universal, un Parlamento y un jurado vivimos en democracia”.

¡VIVA LA REPÚBLICA!


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Posted in: Republicanismo